Según Contreras (1995), el control interno es efectuado por diversos
niveles, cada uno de ellos con responsabilidades importantes. Los directivos,
la gerencia y los auditores internos y otros funcionarios de menor nivel
contribuyen para que el sistema de control interno funcione con efectividad,
eficiencia y economía.
Una estructura sólida del control interno es fundamental para promover el
logro de sus objetivos y la eficiencia y economía en las operaciones de cada
entidad. Por ello, la dirección es responsable de la aplicación y supervisión
del control interno.La legislación puede establecer la definición del control
interno y sus objetivos, así como prescribir las políticas que se deben aplicar
para supervisar la estructura de control interno e informar sobre su idoneidad.
La dirección de una entidad gubernamental debe adoptar una actitud positiva
frente a los controles internos, que le permita tener una seguridad razonable,
en cuanto a que los objetivos del control interno han sido logrados.
Para contribuir al fortalecimiento del control interno en los gobiernos
regionales, la dirección debe asumir el compromiso de implementar los criterios
que se enumeran a continuación:
- Apoyo institucional a los controles internos;
- Responsabilidad sobre la gestión;
- Clima de confianza en el trabajo
- Transparencia en la gestión gubernamental; y,
- Seguridad razonable sobre el logro de los objetivos del control interno
No hay comentarios:
Publicar un comentario